martes, 27 de septiembre de 2011
Poemario: ¡Para Escribirse en las Calles!
¡PARA ESCRIBIRSE EN LAS CALLES!
I
La Poesía de aferrarse al sueño más imposible,
el que me mueve desde que tengo razón…
por quien rendí el corazón…
Buscaré si es necesario en cada mujer a mi mujer…
Sacrificaré mis pasos de nuevo en pos de esta búsqueda…
Estaré dispuesto de nuevo a vivir el diluvio…
A pasar de nuevo el oscurantismo si fuese necesario…
A voltear cada piedra,
A nadar en el río,
A escalar cada árbol,
a vivir sin descanso…
Dibujaré por el mundo el camino que nos úna…
por si me llevan loco, gritando tu nombre…
rompiendo vitrinas, buscando tus ojos…
II
Cuanta falta nos hacemos mi niña,
cuantas lágrimas hemos tirado por otros,
cuanta saliva hemos tirado al piso,
cuantas ganas no nos hemos entregado,
cuantos pasos nos han dispersado,
cuantas verdades no nos hemos dicho,
¿es el café amargo también en tu espera?
¿es que en tu noche tampoco hay estrellas?
¿es tu soledad tan fría como la mía?…
¿es acaso tu desespero tan incesante?
III
Te quiero decir que te escribo de noche
Por que sea tal vez de esta forma que te alcanzo a escuchar…
Sin duda roncas en mi cabeza como el león en la sabana
Sin duda eres la estrella que me falta para desembarcar
Te digo de una vez, para que no haya debate después
¡No te resistas, eres mía y nada más!
Y otra cosa te digo, con la misma voz
¡No me resisto, soy tuyo desde hace un tanto,
Y desde hace otro, decidí serlo siempre…!
IV
Creo que el problema ha sido el quererte encontrar.
Mi aferrada avidez de tu rostro
me ha hecho esclavo de alguien que no conozco.
Es irreal la cantidad de momentos que no hemos pasado juntos,
las muchas risas que todavía no tenemos,
los huecos en el estomago que nos esperan,
las miradas de ansias desesperadas que nos aguardan
y los abrazos reconfortantes que necesito.
Cómo quisiera vagar contigo por el mundo,
perdernos en sus calles,
acostarnos en sus jardines,
nadar en todos su mares.
Sentir que el mundo es pequeño si lo caminamos juntos.
V
¡Mi corazón se endurece y cada vez más miedo tengo de escribirte!
VII
No son tus caderas,
o tu nariz perfecta,
son tus miradas…
y tus palabras verdaderas…
Sin medidas, sin excesos,
sin prisas ni letargos...
con la avidez de tu rostro
sin aún ser tu esclavo,
con las manos unidas
y los corazones separados...
Te propongo locura y prudencia
Te propongo embriaguez y conciencia
Vamos prontos al encuentro de los ojos
pero cautos al entregarnos uno al otro.
VIII
Por si alguien escucha…
Si es que no hablo al aire, si es que mis gritos tiene eco, te pido casual escucha que disperses mi mensaje. Yo ya no lo puedo hacer más. Te hablo desde el corazón, lo único que queda. Déjame contarte del desastre que es hoy esto. Los labios están rotos y manchados, los parpados cansados, cerrados de miedo y por una oscura afición a soñar. Es ahí donde todo empezó una bola de nieve blanca, finita con ataduras negras que caían hasta los hombros. Se la llevó el calor del día y por buscarla todo se fue de picada. Ahora las puntas de los dedos quemadas, ya no se siente nada. La lengua áspera y de fuera, busca como serpiente quién la sacie. Y no hablemos de la nariz, de su absurda obsesión de encontrar lo que perdió en un puñado de cabellos.
Todo se ha acabado, ¡esto de vivir mata! Con decirte que los pies, tan firmes y orgullosos, que alguna vez corrieron hasta esos ojos, ¡han perdido por completo la razón! Se la pasan persiguiendo otros pies para ver si algunos, de suerte, se les quieren subir. Figúrate también que el cabello que tanto tiempo estuvo en regla ahora es un completo revolucionario, está haciendo campamento aquí y allá. Y el pobre cerebro, una verdadera tragedia, tan ágil, tan rápido, tan… ¡Valió Madres! Con todo respeto mi señor. ¡Valió… Madres! Ahora está encerrado entre cuatro paredes blancas y no creo que vuelva jamás. Y para rematar los ojos siguen creyendo que no pasa nada, aún cuando en la mayor parte están en tinieblas ellos creen que es solo un día muy muy nublado. Y de aquellas no hablemos, pues fueron ellas quienes nos enterraron más y más.
Entonces como verás estimado escucha todo está acabado, solo falta la estocada final, quien sea bastará. Pero no des al viento mis palabras, guárdalas y repártelas como la mañana reparte sus rayos. No dejes que desaparezca en el tiempo, que me vaya sin dejar huella. Entrégale a otro incauto mis desdenes para que aprenda también lo que pasa en la espera.
Todavía No Te Amo - Poemas Perdidos
CREO QUE TODAVÍA NO TE AMO
Por la intensidad de este sentimiento
por la ansiedad de tenerte
por este martirio de no verte
y por el tiempo sin Ti tan lento...
Puedo decirte que te amo...
Pero la ilusión de un futuro
lleno de hermosas semillas
con las manos siempre unidas
venciendo inviernos duros…
Entonces, creo que todavía no te amo...
El inmenso amor de ahora,
será como un grano de arena
en las arenas del mundo...
Un amor por ti me ciega,,
que sin ti me pierdo
que siempre reniega
cuando no te tengo...
Te amo tanto ahora,
que es difícil imaginar
que hay todavía más entrega
con aún más felicidad.
Es por eso que puedo decirte que te amo,
pero entonces después de tanto pensar
creo que todavía no lo hago...
Por la intensidad de este sentimiento
por la ansiedad de tenerte
por este martirio de no verte
y por el tiempo sin Ti tan lento...
Puedo decirte que te amo...
Pero la ilusión de un futuro
lleno de hermosas semillas
con las manos siempre unidas
venciendo inviernos duros…
Entonces, creo que todavía no te amo...
El inmenso amor de ahora,
será como un grano de arena
en las arenas del mundo...
Un amor por ti me ciega,,
que sin ti me pierdo
que siempre reniega
cuando no te tengo...
Te amo tanto ahora,
que es difícil imaginar
que hay todavía más entrega
con aún más felicidad.
Es por eso que puedo decirte que te amo,
pero entonces después de tanto pensar
creo que todavía no lo hago...
Te Propongo - Poemas Perdidos
Te propongo
No son tus caderas,
o tu nariz perfecta,
son tus miradas…
y tus palabras verdaderas…
Sin medidas, sin excesos,
sin prisas ni letargos...
con la avidez de tu rostro
sin aún ser tu esclavo,
con las manos unidas
y los corazones separados...
Te propongo locura y prudencia
Te propongo embriaguez y conciencia
Vamos prontos al encuentro de los ojos
pero cautos al entregarnos uno al otro.
Hay Niña - Poemas Perdidos
Hay niña,
si solo supieras como te quiero, te quiero como sentados en la orilla de una fuente, como mi insistencia por escucharte, como mi perdón por tu perdón, como tus pies cansados y el privilegio de aliviarlos, como acomodándome la corbata o mandándome a peinar, como un beso largo de bienvenida, como un niño a una niña.
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